Huawei ha realizado con éxito pruebas para la transmisión de datos por Wi-Fi a 10 Gbps (gigabit por segundo). Se trata de un nuevo hito ya que multiplica por 10 la velocidad máxima ofrecida en la actualidad. La compañía estima que el lanzamiento de esta nueva tecnología Wi-Fi comenzará en 2018.
Las necesidades de conexión cada vez son mayores y las redes y sistemas de transmisión reclaman mejoras casi constantes. La calidad de los contenidos producidos no para de aumentar, así como el número de usuarios conectados. Esos incrementos suponen que sea necesario actualizar las redes de comunicación para mejorar la experiencia y conseguir mejores resultados.
Las redes Wi-Fi deben evolucionar y parece que Huawei está trabajando en ello con éxito. La compañía china ha realizado un importante experimento en sus laboratorios de Shenzhen, en donde se ha conseguido una velocidad de transmisión por Wi-Fi récord. En concreto, se han sobrepasado los 10 Gbps en las pruebas.
Los investigadores de Huawei han conseguido alcanzar los 10.53 Gbps en el experimento, lo que supone multiplicar por 10 la velocidad de transferencia máxima registrada con los sistema Wi-Fi actuales. El incrementos es espectacular y el éxito de las pruebas permite confirmar que el futuro de los sistemas Wi-Fi ya está en camino.
Potencial de futuro
Con una velocidad de transmisión de 10,53 Gbps las posibilidades son enormes y puede suponer toda una revolución para el sector tecnológico. Los servicios y los dispositivos conectados pueden ampliar su potencial de forma más que considerable y el futuro se vuelve muy prometedor para empresas y usuarios.
Desde Huawei han celebrado el éxito de su experimento y han asegurado que esperan que su tecnología marque la senda del desarrollo de la nueva generación de redes Wi-Fi. En la compañía han destacado que habrá que esperar varios años hasta que esta nueva tecnología esté disponible para su explotación y han fijado el 2018 como posible año para su llegada.
Durante los años que restan hasta 2018 Huawei y el resto del sector tendrán que terminar de desarrollar esta tecnología, que todavía presenta grandes retos. Además, de confirmar su estabilidad y respuesta, habrá que trabajar para conseguir que los sistemas Wi-Fi de alta velocidad respondan con calidad en entornos con grandes niveles de densidad de población conectada, que se perfilan como la norma de cara al futuro.
Fuente: cincodias.com